Por Andrés Felipe Ardila
13 de junio de 2019 - 9:25 am
Tienes una relación genial con tu pareja y la amas con toda tu alma. Pero resulta que por vueltas del destino, alguno de los dos, le toca irse lejos. ¿Será que vale la pena esperar o cada uno seguir su camino? Aquí encontrarás la respuesta.
Son novios, llevan una linda relación, pero ese cuento rosa cambió, cuando un día, uno de los dos llegó y dijo, -Oye bebé, me tengo que ir a vivir a otra ciudad-. Tu pareja -o tú- tomó la decisión porque convenía en los planes personales. Pero la persona que amas quedó por fuera de tu vida. En el fondo, sabes que cuando ya no estén juntos, las cosas no serán iguales.
El gran dilema: esperar o seguir
En muchos casos, las parejas se prometen mutuamente esperar hasta nuevamente estar juntos. Pero primero que todo, en una situación así, hay que darle prioridad a la razón, sopesar los pros y contras para determinar si vale la pena someterte al reto.
Evaluando la situación
Puede que tú tengas toda la intención y voluntad de serle leal a tu pareja, pero ocurre muchas veces, que la otra persona no tiene ese mismo compromiso. Por tanto, aquí está el test, que te permitirá decidir si vale la pena tener una relación así, o mejor cerrar capítulo:
1- ¿Ha sido fiel a ti?
Si: 4 puntos. No: 0 puntos.
2- ¿Tu pareja es atenta contigo?
Si: 2 puntos. No: 0 puntos.
3- ¿Ha sido serio en sus promesas?
Si: 4 puntos. No: 0 puntos.
Si el resultado dio 10 puntos, sigue adelante con la relación. Pero si tu puntaje fue menos de 8, pon los pies sobre la tierra y dile que mejor dejen las cosas así. Si fue infiel estando cerca, menos lo será si está lejos; o si ha sido incumplido con sus promesas, es muy posible que conozca otra persona y se olvide de ti.
Piensa en el plazo
Decidiste llevar la relación a distancia, pero ten en cuenta, que para evitar futuros sufrimientos, para todo hay que establecer un plazo ¿Es factible en el corto o mediano tiempo estar juntos? Esta pregunta debes respondértela con la mayor sinceridad posible, ya que en toda relación hace falta alguien de carne y hueso al lado, que te dé un abrazo, un beso, que te sientas amado e importante.
Lugar no lejano
Cuando es un lugar que tome hasta 8 horas viajando, es factible, ya que puedes en algún momento pegarte una escapada y ver a quien amas. Mientras estés en tu ciudad, puedes llamarle, escribirle y mantener pendiente.
Analizando el tiempo: Si el tiempo de ausencia es más de un año, durante ese tiempo, pueden pasar muchas cosas. Por un lado, así se comuniquen, se escriban mensajes lindos, a todo ser humano le hace falta tener una persona que pueda tener en vivo y en directo y poder manifestar con más frecuencia expresiones de amor que van más allá de las palabras. Tú no puedes besar la pantalla un celular o de un portátil.
A la mayoría de las personas no les gusta la soledad. Así hables por teléfono o chat, y la visites cada 2 semanas, de todas maneras, en el fondo sentirás el vacío de la distancia.
La vida sexual
Esta sí que es una cuestión complicada, porque este es un motivo por el cual muchas parejas a distancia son infieles. En muchos casos dicen -voy a tener sexo con x persona; eso no se dará cuenta-. Es por eso, que cuando alguien se encuentra tan lejos, es difícil que por mucho tiempo se vaya a abstener de tener algo con alguien más.
Lugar muy lejano
Este es un asunto bastante complicado, porque solamente vas a poder llamarle y escribirle. Así firmen un compromiso formal o vayan ante el altar de una iglesia, eso no garantiza nada. Puede que te duela mucho tener que ver que se vaya quien amas, pero una relación se asemeja a un jardín: si te vas por mucho tiempo, cuando vuelvas, las flores se han secado.
Cuando una persona se va muy lejos, si no lo vas a ver en más de 6 meses, es mejor cortar y agradecer lo vivido. Aunque pensar sin la mente clara, las emociones te traicionan. Por tanto, debes ser sensato y considerar que llevar una relación así, es para sentir vacío y al final muchas veces la desilusión.
Millones de celulares se venden al año en el mundo. En Colombia a la hora de cambiarse un teléfono, bien sea porque está obsoleto o porque definitivamente se dañó, la mayor parte de estos dispositivos se van a la basura, no solo contaminando el medio ambiente, sino también desaprovechando la reutilización de los materiales con los que están hechos. Ahora te darás cuenta sobre la doble moral del reciclaje y la importancia de que tengamos consciencia.